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Posts Tagged ‘Heidegger’

Artículo (pdf): G. Vattimo, «Historia de una coma. Gadamer y el sentido del ser»

02/08/2010 2 comentarios

Artículo de Gianni Vattimo, donde se subraya una ambigüedad en la hermenéutica gadameriana, resuelta de manera «metafísica» por el autor de Verdad y Método. Vattimo propone en el texto una lectura más consecuente con el espíritu heideggeriano que preside la obra de Gadamer, entendiendo la frase de este último «Sein, das verstanden werden kann, ist Sprach» como una traducción de esta otra de Ser y Tiempo «Sein —nicht Seiendes— «gibt es» nur, sofern Wahrheit ist. Und sie ist nur, sofern und solange Dasein ist».

Todos estos «indicios» que permiten reconocer, no desde el ámbito de una metodología abstracta, sino desde la actividad interpretativa efectiva, los prejuicios legítimos, es decir, «adecuados» a las cosas mismas, ¿resultan en todo caso suficientes no sólo para suprimir las sospechas de tradicionalismo y de relativismo, sino también para justificar el propósito de una lectura ontológicamente radical de la tesis sobre el ser y el lenguaje? Planteo tal cuestión de manera bimembre dado que, en el desarrollo de estas observaciones, nos ha parecido que el «realismo» de Gadamer es consecuencia de su insistencia en el problema de la adecuación de la precomprensión: Gadamer habría excluido, en suma, el sentido ontológico radical de su tesis porque le habrían resultado inaceptables las consecuencias metodológicamente nihilistas de una identificación entre el ser y el lenguaje. La hipótesis que yo intento proponer, por el contrario, es que solamente una lectura ontológica radical de la tesis sobre el ser y el lenguaje nos permitirá suprimir cualquier sospecha de que la solución gadameriana al problema del círculo hermenéutico posea una salida relativista —o, como mínimo, resulte vaga e insuficiente—. Pues es justamente por no haber llevado hasta el final la identificación entre ser y lenguaje que Gadamer corre el riesgo de dejar sin responder la cuestión acerca de cómo son «testados» los prejuicios legítimos.

Artículo (pdf): Gianni Vattimo, Historia de una coma. Gadamer y el sentido del ser.
En: Endoxa: Series Filosóficas, Nº 20 (2005), pags. 45-62

Abstract: A partir de la doble posibilidad de traducir en las lenguas románicas la expresión gadameriana «Sein, das verstanden werden kann, ist Sprache» como «El ser, que puede ser comprendido, es lenguaje» o como «El ser que puede ser comprendido es lenguaje», se consideran las importantes repercusiones ontológicas que tendría una interpretación más moderada (y más habitual) de ese enunciado (la primera exhibida), o una lectura más radical y nihilista (la que aquí se defiende) del mismo (la segunda traducción propuesta). Se intenta mostrar que una correcta comprensión de la diferencia ontológica abogaría por esta segunda posibilidad, por cuanto no son los entes los que se reducen, idealistamente, a mero lenguaje, sino el ser. lo cual evita cualquier residuo «metafísico» o «positivista» que, dando por supuesto que este último se reduce a los primeros, aluda aún a cierto «ser» (o, en esta perspectiva, «entes») que está más allá (y aún por descubrir) del lenguaje.

Libro: F. Duque, «El cofre de la nada»

01/05/2010 2 comentarios

En el 2006, Félix Duque publicaba este libro, tratando de hacer un recorrido del surgimiento del nihilismo del mundo tecnificado en los autores más importantes del pensamiento post-kantiano o «tardomoderno». Así, Fichte, Hegel, Schopenhauer, Nieztsche, Jünger, Heidegger, son convocados durante la «deriva» del libro, que va perfilando poco a poco la noción de nihilismo y acaba ensayando una posible «actitud» ante el mismo que no desemboque en las insuficiencias que se descubren en las «soluciones» de los autores citados.

¿Cómo hacer que el propio ser ingrese, también él, en la caducidad? ¿Cómo alcanzar esa pietas hacia lo existente, que preconizara hace algunos años Gianni Vattimo? Bien, aún queda un paso. Un paso que no se da ni desde arriba, ni desde fuera. Un paso al margen, absurdo tanto para el burgués como para el «trabajador». Es el paso que diera un día Georg Büchner, y que ahora repita, decidido, Paul Celan. En ese paso se entrega la dicción infinita de lo übrige, de lo que resta, resistente, en el centro mismo en el que se cruzan cielo y tierra, dioses y mortales. Y también, a través de ese centro, se va tejiendo una línea, la línea del dolor absurdo de todos los asesinados de la historia, y más: de todos los muertos, sin más. Sin justificación posible. Allí donde se «pincha» y «desinfla» por así decir el centro mismo del ser, aparece lo que Celan denomina la «majestad del absurdo». Aparece… como meridiano, la línea que atraviesa todos los paralelos del dolor. La línea que sirve de encuentro solidario, de resistencia sin esperanza contra toda dominación metafísica, mas también, y sobre todo, contra toda «retirada» de un ser incólume. «Ser» es, con Celan, en cambio: comunión en el dolor, reconocimiento -en el amor- de la necesaria caducidad de todo, y del Todo.(Págs. 113-114)

Libro: F. Duque, El cofre de la nada. Deriva del nihilismo en la modernidad.
En: Abada Editores, Madrid, 2006, 116 páginas.

Contraportada: No es verdad que, como auguraba Baudrillard, nada haya tras la obscenidad de la banda sin fin mediática en la que se consume y consuma nuestra postmodernidad tardocapitalista (e. d., consistente en tardar en desaparecer). No es verdad tampoco, por el otro lado, que tras esa banda, como en un negativo, lo revelado sea la profundidad de un Occidente rebelado al fin contra esa superficialidad, según algunos alucinados pretenden, en busca de fundamentos más sólidos y divinos que los del inventado enemigo, ese que cree en el Uno mientras se disemina mortífero por los nódulos plurales de las arterias y otras redes. Sí es verdad que, cansados y desmoralizados, apenas sabemos qué hacer, cortadas las alas del futuro-ficción tras la estruendosa revuelta en el siglo XXI del otro mundo, sojuzgado y mantenido a distancia como material de elaboración para medro del Espíritu depredador. Pero una ronca voz nunca del todo acallada sigue avisando de que algo resta atrás.
Por ello, tras tanto hinchado «humanismo-prietas-las-filas» y tanto espectacular «horror-visco-porno-moral»;, empeñados ambos en obturar el terror que viene del fondo (si tras el velo de la belleza se ocultaba antes lo terrible, bien podría agazaparse ahora el terror tras la banalidad kitsch), quizá no esté de más intentar una segunda navegación en torno a esa Isla de los Muertos que muchos se empeñan en haber dejado para siempre atrás, y preguntarnos por la deriva del nihilismo en otra de nuestras muchas tardanzas: la tardomodernidad (otra «manera» que se resiste a desaparecer, a fuerza de tardar a base de «científicas» largas). Conjurados son pues aquí los espectros de Hegel, de Jünger y de Heidegger para desmantelar pompas y andamiajes, a fin de empezar a entrever en sus oscuras admoniciones el vínculo en que se anudan de antiguo la nada y la muerte.

Índice:
1.De cómo planificar la Historia.
2.De aquí a la eternidad (y vuelta).
3.El código de la circulación.
4.Egoísmo y nihilismo.
5.Hegel, escrutando la nada divina.
6.So ist es aus: el nihilismo reactivo.
7.Nietzsche: la gran devaluación y su remonte.
8.Heidegger: anticipatio mortis.
9.»Über» Jünger y Heidegger.
10.El ser, crucificado (pero como San Andrés).
11.Ahondando en el ocaso.
12.La muerte, cofre de la nada.
13.Forjando una copa al margen.